Las autoridades estadounidenses han detenido a tres investigadores chinos por presunto fraude en su solicitud de visado y buscan a una tercera que al parecer permanece en el consulado de China en San Francisco, según ha informado el Departamento de Justicia (DOJ).

Las detenciones se han conocido después de que el Gobierno del presidente estadounidense, Donald Trump, forzara a China a cerrar su consulado en Houston (Texas) en medio de nuevas acusaciones de espionaje, una de las acciones más agresivas que ha tomado el país desde que estableció relaciones diplomáticas con Pekín en 1979.

En un comunicado, el DOJ detalla que cuatro personas fueron acusadas de fraude en sus visados "en relación con un plan para mentir sobre su condición de miembros de las fuerzas militares de la República Popular de China, el Ejército Popular de Liberación (EPL), mientras realizaban investigaciones en Estados Unidos".

"Tres de estos individuos han sido arrestados y la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) está buscando a un cuatro prófugo de la justicia que actualmente se encuentra en el consulado de China en San Francisco", puntualizó el DOJ.

El fiscal adjunto de seguridad nacional, John Demers, ha indicado que estas personas "solicitaron visados de investigación mientras ocultaban su verdadera afiliación con el EPL". De ser declarados culpables, pueden encarar una pena de 10 años de prisión cada uno y una multa de 250.000 dólares.

"Hiciron declaraciones falsas sobre su servicio militar"

El DOJ identificó entre los acusados a Xin Wang, quien ingresó al país el 26 de marzo de 2019 y presuntamente "hizo declaraciones fraudulentas" en su solicitud de visado. Según documentos judiciales, Wang "todavía estaba empleado por el EPL mientras estudiaba en EE.UU. e hizo declaraciones falsas sobre su servicio militar".

El investigador fue arrestado el pasado 7 de junio y tuvo una comparecencia judicial un día después, detalló el DOJ. Las otras dos detenidas, el pasado 18 de julio y sin que se precisara el lugar, fueron identificadas como Chen Song y Kai Jai Zhao.

Una de ellas, de acuerdo con el comunicado oficial, entró al país en diciembre de 2018 y era integrante de la Fuerza Aérea de su país "cuando ingresó y mientras permanecía" en territorio estadounidense, al tiempo que se presume mencionó un hospital como su empleador para encubrir su verdadera vinculación laboral.

Mientras que Zhhao es acusada de negar que había servido en el Ejército de su país cuando, según la demanda en su contra, prestó servicio en la universidad Nacional de Tecnología de Defensa, que el DOJ describe como "la principal institución de investigación científica y de educación del EPL".

Finalmente, el Departamento de Justicia indicó que busca a Juan Tang, una investigadora que llegó a Estados Unidos en diciembre de 2019, también es acusada de hacer declaraciones fraudulentas en su pedido de visado, en el que negó haber servido en el Ejército.