Una fuente oficial ha dicho a la agencia estatal de noticias Mena que el presidente egipcio, Abdelfatah al Sisi, ha aceptado la deportación de Greste y que la Embajada de Australia en Egipto ya ha reservado un vuelo para que el periodista vuelva a su país en las próximas horas.

La televisión Al Yazira ha expresado su "satisfacción" por esa decisión, que permite a Greste salir de Egipto después de haber sido privado de libertad cerca de cuatrocientos días. En un comunicado, la televisión ha destacado que Greste voló en un avión de la compañía Egyptair y ha recordado que todavía quedan en prisión sus dos compañeros, el egipcio con pasaporte canadiense Mohamed Fahmi y el egipcio Baher Mohamed, por lo que pidió que estos dos sean liberados.

El director general de la red Al Yazira, Mostafa Suag, ha afirmado que "la integridad de Peter no está solo intacta, sino que ha demostrado sacrificio por su profesión para informar al público". Los tres reporteros del canal catarí fueron detenidos en diciembre de 2013 en un hotel de El Cairo y sentenciados a entre siete y diez años de cárcel.

El pasado 1 de enero, un tribunal egipcio ordenó la repetición del juicio a los tres periodistas, pero rechazó ponerlos en libertad. La fuente oficial egipcia no precisó si las autoridades egipcias han tomado alguna decisión en relación con Fahmi y Mohamed.

En los últimos meses se había hablado de la posibilidad de un perdón presidencial y de la aplicación de una nueva ley emitida en noviembre pasado que permite expulsar a sus países de origen a los extranjeros que estén siendo juzgados en Egipto. La familia de Greste ha dicho en Australia que su principal deseo era que el periodista fuera deportado mediante un decreto presidencial.