Durante un mitin de
campaña en Sunrise, oeste de Fort Lauderdale (Florida), el aspirante
republicano criticó la gestión de Obama en la lucha contra el terrorismo
internacional y manifestó que era el "fundador de Daesh" y que su
rival en la carrera presidencial, Hillary Cliton, era la
"confundadora" de este grupo terrorista.
"Daesh rinde
respeto al presidente Obama. Obama es el fundador de Daesh y diría que Hillary
Clinton es la cofundadora", afirmó Trump, ante los gritos de sus
seguidores "Encerrarla" dirigidos a Clinton. Trump apareció en
Florida para mantener el tono incendiario de recientes mítines y acusó a la
prensa estadounidense de estar "amañados" y ser "tan deshonestos
como la deshonesta de Hillary Clinton".
"Miren lo de ayer
(martes) por ejemplo", dijo ante sus simpatizantes, en alusión al discurso
que pronunció en Carolina del Norte, donde abogó por que los defensores de la
segunda enmienda de la Constitución, que recoge el derecho a portar armas,
contengan a su rival demócrata, Hillary Clinton, lo que fue interpretado como
una "incitación a la violencia".
"Tenemos que
proteger la segunda enmienda, está bajo acoso", manifestó Trump en
esta ciudad del sur de Florida, para luego criticar que Obama rehúse a
calificar de terroristas a los radicales islámicos que han perpetrado atentados
como los de Orlando (Florida) y San Bernardino (California), y auguró que
Clinton seguirá esa tendencia.
"Ella no quiere
decirlo, porque ella no quiere ofender al presidente (Obama), porque entonces
las cosas malas pueden sucederle a ella si ofende al presidente", afirmó.
El candidato republicano calificó de "terrible" que el padre de Omar
Mateen, el estadounidense que mató en junio pasado a 49 personas en un bar de
Orlando (Florida), acudiera el lunes a un mitin en Florida de Hillary Clinton.
"Le gusta ella
porque no dice nada contra los islámicos radicales", manifestó Trump.
Después de que medios estadounidenses revelaran la presencia de Seddique
Mateen, la campaña de Clinton dijo el martes que no lo habían invitado y que se
trató de un acto abierto al público en el que repartieron 3.000 entradas a
aquellos que las solicitaron.
"Esta persona no
fue invitada y la campaña no estaba al tanto de su presencia hasta después del
evento", señaló un portavoz de la campaña. El magnate, que volvió a
definirse como un "outsider" dentro del Partido Republicano", no
se refirió de manera directa al comentario del martes en el que aseguró que los
amantes de las armas pueden "hacer algo" para detener a Clinton, lo
que ha sido interpretado como una llamada a la violencia.
"Por cierto, si
consigue elegir jueces (del Tribunal Supremo) no va a haber nada que podamos
hacer, aunque para la gente de (que defiende) la Segunda Enmienda quizá sí que
hay algo (que pueden hacer). No lo sé", manifestó Trump el pasado martes
en Carolina del Norte.
El comentario mereció el
rechazo de sectores demócratas, empezando por la propia Clinton, quien criticó
a su rival republicano por "pasarse de la raya" y señaló que
"las palabras pueden tener tremendas consecuencias". "Cada uno
de estos comentarios demuestran que Trump no tiene el temperamento para ser
presidente de Estados Unidos", agregó la exsecretaria de Estado en un acto
de campaña en Des Moines (Iowa). Trump tiene previsto otro acto de campaña el
jueves en la ciudad de Kissimmee, también en Florida.