Almeida rectifica a medias con la bandera LGTBIQ+: deja que se cuelgue en los bancones de cada grupo, pero no en el Ayuntamiento

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha cambiado de opinión o, al menos, ha rectificado en su lucha contra la bandera del colectivo LGTBIQ+. Un símbolo que ondeó en la fachada del Ayuntamiento de Madrid durante el mandato de Manuela Carmena y que se prohibió en el 2019, cuando el popular llegó al consistorio. Ahora, seis años después, Almeida ha dado un giro en su discurso y permitirá que los grupos municipales cuelguen la bandera LGTBIQ+ de sus balcones durante el Orgullo de este 2025.

Eso sí, es una rectificación a medias pues, aunque permite que sea cada grupo político el que decida si pone este símbolo en sus ventanas, durante las celebraciones del Orgullo LGTBIQ+; no habrá una bandera en la fachada del Palacio de Cibeles que represente a todo el Ayuntamiento. Dice Martínez-Almeida que quiere mantener la "neutralidad institucional". Un discurso que repite desde que se convirtió en el alcalde de la capital y que siempre ha despertado polémica con el resto de grupos municipales en el Ayuntamiento de Madrid. Pero también, en otros ayuntamientos de España.

En definitiva. Aunque el Ayuntamiento de Madrid no colgará la bandera arcoíris de su fachada, Almeida, finalmente, reconoce el derecho a que sí lo hagan los grupos municipales que lo deseen. Eso sí, que se expresen, pero desde las ventanas de sus balcones en el edificio. Permite que se ejerza "el derecho, que después de la sentencia del Tribunal Supremo, tienen los grupos municipales de colocar la bandera en los balcones de los grupos municipales", ha dicho el propio alcalde.

Con estas palabras, además ha corregido la petición hecha por el Presidente del Pleno del Ayuntamiento. Solicitaba que se retiraran todas las banderas LGTBIQ+ de las fachadas municipales. Todas. Una exigencia que causó gran enfado en la oposición. "Si quieren quitar la bandera, que vengan ellos a quitarla", ha dicho Rita Maestre.

Desde el grupo Socialista ya han anunciado que reivindican este derecho desplegando una bandera a todo color. "Aquí están los balcones de la Delegación del Gobierno, de los Ministerios y, por ejemplo, los balcones de algunos de los grupos municipales del Ayuntamiento de Madrid", ha expresado Francisco Martín, delegado del Gobierno de Madrid, tras inaugurada los festejos por el Orgullo.

"Es una muestra, de nuevo, de la cobardía del señor Almeida que le molestan las banderas", ha denunciado Reyes Maroto, la portavoz socialista.

La antesala del Orgullo 2025 deja un mapa dispar al margen de las siglas y a voluntad de los Ayuntamientos. Hay polémica en Valencia, en Toledo y también en Guadalajara, que un año más no desplegarán la bandera del colectivo. En el lado contrario de la balanza, pese a compartir siglas, están los consistorios populares de Málaga y Logroño o el Parlamento de Andalucía, que sí lucen sus banderas arcoíris.

Giro en la opinión de Almeida sobre el Orgullo

Aunque la rectificación de este jueves de Almeida es parcial, pues el Ayuntamiento no colgará una bandera LGTBIQ+ oficial, hay que recordar que este giro en el camino del alcalde, ya es mucho.

José Luis Martínez -Almeida se convirtió en alcalde de Madrid en el año 2019. Desde entonces, durante seis años, cada vez que se aproxima la celebración del Orgullo, empieza la discusión. Por eso, en mayo, se le preguntó al popular sobre el tema. Su respuesta fue un breve pero claro: "No".

Poco antes, la portavoz de Más Madrid, Rita Maestre, le había mandado una carta. En ella, le pedía que este 2025 se desplegase la bandera arcoíris en la sede consistorial. En 2024, el Tribunal Supremo avaló que la bandera del colectivo se podía colgar en edificios públicos durante la celebración del Orgullo. Es más, aseguró que no es ni un "símbolo de significación partidista" ni propugna "ningún tipo de enfrentamiento". Por lo que fue el Supremo el que tiró por tierra la alegación de Almeida, que asegura que hay que guardar la neutralidad.