Las nóminas no suben igual que el precio de la cesta de la compra. Se trata de una pelea en la que acabará perdiendo el trabajador cuyo contrato no sea revisado y no tenga una subida de, al menos, el mismo nivel que el del encarecimiento de los precios.

Echando la vista atrás, en 2018, el IPC y los salarios pactados en convenios fueron a la par. Un año después, la cesta de la compra repuntaba bastante menos que los sueldos, y en 2020, en plena pandemia, la diferencia se mantuvo con un IPC en negativo.

Hasta ahí se mantuvo la ganancia de poder adquisitivo, pero ahora se tuerce. Los convenios pactados ya este año contemplan un alza de un 1,5% frente al subidón de los precios hasta julio.

Comisiones Obreras señala que no compensa el poder adquisitivo ganado en los dos últimos años con el subidón de precios de la vida.

Este debate se abre en paralelo junto a otro sobre la subida del Salario Mínimo Interprofesional. En septiembre, el Gobierno se reúne con patronal y sindicatos para retomarlo.

El Ejecutivo, a propuesta de la vicepresidenta Yolanda Díaz, se abrió a volver a subirlo con la recuperación en marcha, pero desde la CEOE apuntan a laSexta que no está en sus planes apoyar un aumento del SMI, al menos en este 2021.