Novak Djokovic venció con facilidad a Tommy Paul en las semifinales del Open de Australia por 7-5, 6-1 y 6-2. Y pese a estar al borde de recuperar el número uno del mundo y obtener su décimo título en Australia, la rueda de prensa posterior se centró en su padre Srdjan.

El progenitor de Novak se ha visto salpicado por la polémica después de ser grabado haciéndose fotos con un grupo de aficionados serbios con banderas de Rusia y la cara del presidente del país Vladimir Putin.

Y en la rueda de prensa posterior a su victoria en semis, Djokovic ha querido manifestarse por primera vez: "No me gustó la fotografía que vi, pero mi padre pensaba que se hacía una foto con la bandera de Serbia. Ni mi padre, ni yo ni nadie de mi familia apoyamos ningún tipo de guerra porque hemos vivido una muy de cerca".

El revuelo causado por la foto en cuestión ha provocado que su padre no acudiera al encuentro que ha disputado ante Tommy Paul para generar mayores problemas, algo que ha pedido que no espera que se repita en la final ante Tsisipas: "Me gustaría que esté en mi palco en la final. Lo único que hizo fue acercarse a hacerse fotografías con aficionados serbios y agradecerles el apoyo como hace siempre".