150 metros a pulmón, sin bombona de oxígeno. Más de 3 minutos bajo el agua. Es el récord que ha conseguido Walid Boudhiaf. El apneista profesional ha logrado batir el récord de apnea en el mar. Las imágenes son sobrecogedoras.
Al llegar a 150 metros de profundidad apenas se le distinguía. "Es conveniente no apagarse del todo, ni siquiera cerrar los ojos", afirma el apneista sobre el peligro que conlleva realizar este deporte a tantos metros de la superficie.
"Un ascenso rápido podría expandir una burbuja de nitrógeno en sangre", explica el apneista español Miguel Lozano sobre el peligro al que se enfrentaba Walid. A pesar de ello logró, con la ayuda de una cuerda, ascender tras llegar a los 150 metros de inmersión. El tunecino consiguió su hazaña, batiendo el récord mundial de apnea a mayor profundidad.