Rory McIlroy no volverá a empuñar el palo de golf junto a Donald Trump. El número 1 del mundo, que en 2017 disputó un partido con el presidente de EEUU, ha criticado la labor del dirigente en esta crisis del coronavirus. "No actúa como debería actuar un líder", afirma.

"Hay algo de diplomacia que se debe mostrar y no creo que haya sido así. Está tratando de politizar todo y convertir esto en un mitin de campaña, diciendo, como si fuera un concurso, que EEUU suministra la mayoría de test del mundo como si fuera un concurso", dice McIlroy.

El irlandés habla de cómo fue Trump el día en que jugaro njuntos en 2017: "Fue agradable y amable con todos. Es muy carismático. Tiene algo, porque no de tenerlo no estaría en la Casa Blanca. Los disfruté, pero no significa que esté de acuerdo con todo, o con alguna cosa que diga".

Parece ser, eso sí, que ese será su último partido: "No volveré a jugar con él, quizá sea muy egoísta decir 'no', y no sé si él querrá jugar conmigo tras lo que acabo de decir".

Estados Unidos es el país que más está sufriendo los efectos del coronavirus, tanto en número de casos como en muertes.