La Fórmula 1 acostumbra a hacer el 'amigo invisible' entre los pilotos. Y a Fernando Alonso le tocó Daniel Ricciardo. El español tiró de imaginación para pensar un regalo para el piloto de McLaren.

Un regalo más 'formal' como una botella de vino y otro inesperado: un tatuaje de la cara de Alonso. Y Ricciardo no ha dudado en ponérselo en el brazo. En la rueda de prensa de Abu Dabi lo ha mostrado.

"Le toqué a Fernando en el 'amigo invisible', y junto con una bonita botella de vino, también me dio algunos tatuajes temporales de... Fernando. Es bonito. Tenía ya varios, así que estaba feliz con ese regalo", ha explicado entre risas el de McLaren.

Tras la rueda de prensa, ambos pilotos se encontraron y entonces ya comenzó el cachondeo definitivo. "Es bonito, es bonito...", se lo mostraba Ricciardo a Alonso. Y el de Alpine decidió besarlo. "Fernando acaba de besar a Fernando", seguían riendo.