Toquemos madera, pero tras haberse consumido las dos primeras fechas del calendario de Fórmula 1, podemos afirmar que la competitividad ha regresado al 'Gran Circo' tras más de un lustro de dominio perenne de Mercedes.

Red Bull al fin tiene alas para disputar el título a las 'flechas de plata', Ferrari ha resurgido de sus cenizas, McLaren rueda divinamente con el motor Mercedes, AlphaTauri cada vez es menos tapado, Alpine y Aston Martin no pierden comba... la F1 está preciosa.

¿El gran damnificado? Evidentemente, Mercedes. Los alemanes han visto como la distancia con Red Bull se ha reducido considerablemente, pudiendo Max Verstappen derrotar al fin a Lewis Hamilton en igualdad de condiciones.

Lo visto en Sakhir e Imola en las dos primeras carreras de campeonato es la prueba fehaciente de que Mercedes necesitará mejorar mucho para volver a coger distancia con respecto a Red Bull.

Andrew Shovlin, ingeniero jefe de pista de Mercedes, ha asegurado que de no mejorar las prestaciones actuales del W12 de Hamilton y Bottas, los de las bebidas energéticas "ganarán el campeonato".

"No nos vamos de Imola dándonos una palmadita en la espalda y diciendo que puede que hayamos tenido el coche más rápido. Nos vamos teniendo claro que no somos lo suficientemente buenos y que Red Bull ganará el Campeonato si no mejoramos nuestro coche muy rápido. Esa es nuestra forma de pensar", ha explicado en declaraciones recogidas por la 'ESPN'.

"Creo que les podíamos haber llegado a presionar durante la carrera. No sé si hubiésemos podido ganar, ya que desconozco si Max apretó muy fuerte en todo momento. Al ver los sectores, nosotros estábamos muy cerca de ellos en el paso por curva", ha añadido Shovlin.

A su vez, la cabeza de Mercedes, Toto Wolff, también ha asumido la superioridad de Red Bull en el arranque de campeonato, aunque de ejecutarse mejoras, unido a lo que se ve en pista, el jefe de Mercedes cree que volverán a la cima de la clasificación.

"Seguimos teniendo algo de déficit con el coche. Hicimos la Pole, pero si Max hubiese hecho una buena vuelta estaría tres décimas de segundo por delante. Creo que ese es el orden de la parrilla ahora mismo. En la carrera todo es más complicado de juzgar, pero en Mercedes tuvimos un buen coche y lo estamos empezando a entender. Eso sí, según los datos, no tenemos un coche capaz de igualar su ritmo", ha señalado Wolff.