Quique Setién ya ejerce como entrenador del Barcelona y su primer objetivo es recuperar el estilo perdido. Discípulo de Johan Cruyff, su gusto por el fútbol de posesión es más que conocido. "Puede parecer que es prepotencia, pero mis convicciones vienen porque es el fútbol que me gustaba cuando jugaba. Yo disfrutaba en el patio del colegio con el balón, no sin él. Y eso es lo que ha guiado mi vida y lo que me mueve. Esto mismo lo sienten el 99% de los futbolistas", explica el técnico en una entrevista a 'BarçaTV'.

"Me gusta que mi equipo juegue bien. Es la única manera de que me vaya satisfecho a casa. Si ganamos sin jugar bien, me iré a casa de mala leche porque uno necesita sentirse bien. Y si haces las cosas bien, siempre tendrás posibilidades de ganar", continúa el cántabro, que confesó que el día anterior a su fichaje se encontraba paseando con las vacas.

Sobre Leo Messi, "el mejor del mundo", también se refirió el extrenador del Betis: "El novel de incidencia que tiene en todos los partidos no se lo he visto a ningún otro jugador en la historia. Es tremendamente determinante. Es único y parece imposible que vuelva a aparecer un jugador como él".

Férreo admirador de Sergio Busquets, al que pidió la camiseta durante su visita de la pasada temporada al Camp Nou, Setién también tiene palabras de elogio para su centrocampista: "Tengo en casa algunas camisetas enmarcadas, las especiales, las de futbolistas que reúne una serie de condiciones que me llenan, también de esos que son personas íntegras... Y ahí entra Busquets".