Sergio Ramos ha revivido de nuevo las imágenes que el madridismo nunca se cansa de ver. El Real Madrid ha compartido, otra vez, el vídeo del gol de la Décima en Lisboa en redes sociales, y el capitán, el autor del gol en el minuto 93 ante el Atlético, se ha mostrado más íntimo que nunca.

"Le dije a mi madre que ya me podía morir tranquilo. Es el gol de mi carrera, mi mejor gol. Por lo que representa para mí, y también para el fútbol y para nuestro club", reconoce.

A Ramos se le siguen iluminando los ojos con su cabezazo ante su ahora compañero Thibaut Courtois: "Uno no deja de emocionarse. Ese gol cambió la historia de nuestro club, cuando prácticamente estaba todo perdido".

"Hasta el último segundo pienso que es posible. Soñaba con el balón perfecto, y Modric la puso donde tenía que ir. No rematé con la cabeza. Rematé con el alma", afirma.

El central habla de para quién fue cada gesto de su celebración en Lisboa: "A mi mujer, a mi hijo que acababa de nacer. Y a mis abuelos. Mi abuelo me decía que algún día se tendría que morir y que no me vería ganar una Champions".

Para terminar, hace una reflexión sobre ese tipo de partidos: "Las finales no se juegan, se ganan. Y la mayoría de finales de Champions League las hemos ganado".