Quincy Promes, exfutbolista del Sevilla que ahora milita en el Spartak de Moscú, ha condenado a 18 meses de prisión como culpable por apuñalar a su primo en un evento familiar.
Los hechos ocurrieron en julio de 2020, y a finales de aquel año fue detenido en la capital holandesa gracias a una llamada. En un primer momento, la Justicia de Países Bajos llegó a acusarle de intento de homicidio, pero finalmente se ha determinado que fue por asalto grave.
Fue procesado por importar 1.300 kilos de cocaína
Hace un mes, el jugador fue procesado por importar 1.300 kilos de cocaína en dos cargamentos que incautó en Amberes en enero de 2020. Este caso se destapó con el apuñalamiento de su primo, ya que se conocieron sus vínculos con el narcotráfico.
En el momento en que ocurrieron incidentes, Promes era jugador del Ajax de Ámsterdam, club que abandonó en febrero de 2021 con destino a Moscú. Con la selección de Países Bajos, a sus 31 años, como internacional ha disputado un total de 50 partidos con la selección 'Oranje'.