El Valencia CF sacó la victoria (1-2) de su visita a Vigo ante un RC Celta que ofreció muy poco a pesar de ponerse por delante poco antes del descanso y estar muy necesitado, tres puntos de los 'che' para buscar el enésimo intento de remontar en la tabla.
El cuadro de Marcelino fue mejor en especial en una segunda mitad muy pobre de los locales. La quinta victoria de la temporada del equipo valenciano les permite verse en el tren que persigue la zona europea, mientras que el Celta sigue marcando el descenso, al cual puede caer si el Rayo gana a la Real Sociedad.
Dos equipos en una temporada dura que comenzaron con ritmo, aunque poco precisos cuando tocaba acercarse a las áreas. El Celta tuvo algo de dominio pero fue el Valencia el que perdonó a la contra, con Santi Mina y Rodrigo en la misma jugada desbaratada por Néstor Araujo. El defensor local fue también decisivo en el otro área, con el 1-0 a la salida de un córner.
Tras el descanso, el Celta aprovechó la ventaja en el marcador para acomodar su juego, mientras un Valencia impotente se mostraba incapaz de generar peligro. Sin embargo, los de Miguel Cardoso renunciaron demasiado pronto al partido y, con la entrada de Ferran Torres y Gameiro, el Valencia fue inclinando el campo.
Con los fantasmas de la falta de puntería, el cuadro 'che' terminó encontrando las cosquillas a Rubén Blanco, con un gran remate de exterior de Ferran. A cinco minutos del final, en un saque de banda y una pared de manual, llegó el 1-2 de Rodrigo, ante un Celta sin pulso que acumula cuatro derrotas y un empate en las últimas cinco jornadas, echando mucho de menos a Iago Aspas.