A pesar del descenso, la afición del conjunto altoaragonés ha sabido valorar durante toda la temporada el trabajo y el esfuerzo de una plantilla que nunca se rindió y que peleó todos los partidos con mayor o menor fortuna en el resultado pero siempre dejándose toda su energía sobre el césped, algo que quedó patente también en el último encuentro de la temporada.

La comunión entre equipo y afición, que no se rompió a pesar de los duros momentos por los que atravesó la plantilla en la campaña de su debut en la máxima categoría, se puso de manifiesto en la jornada en la que se consumó el descenso, frente al Valencia en la capital oscense, y tuvo su epílogo en muchos momentos del encuentro contra el conjunto pepinero, especialmente en el tramo final.

Frente al equipo levantino los aficionados de El Alcoraz, puestos en pie, aplaudieron a unos jugadores desechos en lágrimas y cantaron "volveremos a Primera", algo que se repitió durante el partido frente a los madrileños expresando su convicción y deseo de regresar a la elite del fútbol español más pronto que tarde.

Especiales fueron los aplausos al eterno capitán, Juanjo Camacho, que se despedía del fútbol profesional y que fue ovacionado en cada acción que protagonizo durante los minutos que estuvo sobre el césped. Al final, y como suele ocurrir en este tipo de partidos en los que no hay nada en juego, se hizo con la victoria el que más ganas tuvo de lograrla, un Huesca que si bien en la primera mitad estuvo despistado, en la segunda mejoró y le dio la vuelta al marcador gracias a dos tantos del central Martín Mantovani en sendas jugadas de estrategia.

El conjunto visitante inició el partido mejor posicionado que los propietarios del terreno y pareció más centrado que un Huesca que no era capaz ni de tener el balón ni de salir a la contra porque no recuperaba balones.

A pesar de ello, y aunque el Leganés combinaba bien no creaba peligro porque sus aproximaciones morían al borde del área del equipo altoaragonés, salvo en el minuto 11 en que el cancerbero del Huesca se vio obligado a rechazar un centro raso de Martin Braithwaite que había llegado hasta la línea de fondo.

En la primera media hora apenas se pudo ver nada de juego pero a partir de ahí el encuentro se animó algo con un Leganés que comenzó a rondar el área azulgrana. En un centro desde el lado derecho de Oscar Rodríguez el central Martín Mantovani, que apenas llevaba ocho minutos sobre el césped al haber sustituido al lesionado Xabi Etxeita, introdujo el balón en su portería abriendo el marcador para los visitantes.

Cuando ya el primer tiempo llegaba a su término ambos conjuntos marcaron sendos tantos pero en las dos ocasiones fueron anulados por fuera de juego. El primero fue del venezolano Juanpi Añor en el minuto 44 y uno después marcó Braithwaite.

La segunda parte comenzó más animada, con una oportunidad de Braithwaite, que era el jugador más incisivo de los 22 que había sobre el césped, pero no supo culminar una acción en la que se plantó solo delante del meta local Aleksandar Jovanovic.

En el 56 Martín Mantovani se sacó la espina del gol marcado en propia puerta logrando el tanto de la igualada de cabeza tras un falta botada por Juanpi y dos minutos después Gonzalo Melero pudo haber dado la vuelta al marcador pero su remate de cabeza en el área lo atajó el cancerbero foráneo.

Dos minutos después llegó el momento más emotivo de la noche con la entrada al campo del capitán Juanjo Camacho, que fue recibido con la mejor ovación del partido, para disputar sus últimos minutos como profesional El empate envalentonó al conjunto de "Francisco" Rodríguez que se fue a por la victoria y que la logró, de nuevo con Mantovani como protagonista.

El argentino, otra vez de cabeza, en un saque de esquina envió el balón a las mallas para darle la victoria a los suyos y despedirse con una victoria de la máxima categoría.