Verano de 2009. Florentino Pérez, ganador de las elecciones a la presidencia del Real Madrid, atisba un nuevo proyecto galáctico y pone la mira en tres cracks a nivel internacional: Kaká, Cristiano Ronaldo y Karim Benzema.

Los dos primeros, ya Balones de Oro, aterrizaron en la capital con la vitola de estrellas, pero el tercero guardó un papel más discreto a pesar de su eclosión en todo un Olympique de Lyon.

13 años después, Benzema es el único jugador que queda de aquel verano... y cómo queda: este lunes, el francés se coronó como el mejor jugador del mundo levantando el Balón de Oro.

En el teatro Chatelet, el punta galo compartió unos minutos con Florentino Pérez y ambos recordaron cómo se fraguó su fichaje por el Real Madrid.

"Estás para jugar en esmoquin. Está igual que hace 13 años cuando le fiché", le dijo el presidente madridista a Karim

"No se creía que había ido a su casa. Se quedó mudo, no me dio ni una Coca-Cola", añade Florentino entre risas.

"Menos mal que hablaba francés conmigo", replicó Benzema, el "gato" que aterrizó hace 13 años en Madrid para, a día de hoy, ser el tercer máximo goleador de la historia del club.