El 16 de noviembre de 2003, un jovencísimo Leo Messi, con tan solo 16 años, debutó con el primer equipo del FC Barcelona. Por aquel entonces, ya se veía en el argentino la clase que atesoraba en sus botas.

Tras su debut, Messi fue alternando entre el primer y el segundo equipo azulgrana, rompiendo techos con suma facilidad y aprendiendo de las estrellas que guiaban a los culés: Ronaldinho y Samuel Eto'o.

Precisamente, el camerunés ha reconocido en una entrevista a 'Dazn' la ayuda que le brindó al argentino en sus inicios y el aprecio que le tiene: "Me demostró que no ha cambiado en cuanto a su humildad. Es buena persona".

"Me confesó que gracias a mi consejo, que no voy a decir, su carrera había cambiado. Él tenía que arreglar dos o tres cosas, pero el talento siempre lo ha tenido. Estoy orgulloso y feliz de ver que ha escrito una historia que aún no ha terminado. Será difícil superarle", explicó el camerués.

"Él, al principio, iba subiendo y bajando desde La Masía al primer equipo. Nosotros ya sabíamos que algún día Messi llegaría a ser lo que es ahora. Estoy contento porque, gracias a él mismo, al final lo ha sido", añadió Eto'o.

Además, quiso destacar la humildad que caracteriza a Leo: "Un día dijo: 'Gracias a Samuel, mi carrera cambió'. Me demostró que no ha cambiado en cuanto a su humildad. Sigue siendo la buena persona que conocí".