TAREAS DE RESCATE EN LA CUEVA DE TAILANDIA

Buceando sin espacio durante 8 horas entre fango y agua: así consiguen salir los niños de la cueva en Tailandia

El recorrido por la gruta de Tailandia es muy complicado y necesitan todas las garantías para sacar a los atrapados. Cada uno de los niños va escoltado por dos buzos, lleva máscaras de oxígeno y su botella la carga uno de los profesionales.

Lorena Baeza explica cómo será el rescate de los niños atrapados

Alegría contenida en Tailandia después de que varios de los niños ya estén a salvo, pero sabiendo que aún hay más atrapados. La prioridad en el segundo día de rescate es sacar a todos los niños, pero lograr este objetivo consiste en dos factores.

El primero de ellos es el tiempo, ya que hay amenaza de lluvias torrenciales y eso podría dificultar mucho el rescate e incluso hacerlo imposible. Otra clave es que los niveles de oxígeno han caído a niveles muy preocupantes y han tenido que rellenar todas las botellas de aire, ya que sin eso no podrían volver a la cueva.

Además, el recorrido por la gruta es muy complicado y necesitan todas las garantías. Desde la entrada principal hasta los atrapados hay cuatro kilómetros, que suponen un largo camino bajo tierra con estas condiciones. Casi sin espacio, entre fango y agua, un buceador experto puede tardar cinco horas en recorrerlo, pero este tiempo puede duplicarse si hablamos de un niño que acaba de aprender a nadar y que lleva días encerrado ahí.

Las mejores condiciones están en las cámaras 1 y 2, cerca de la entrada, donde han conseguido bajar el nivel un 40%. Sin embargo, en la otra parte de esa gruta hay muy poco espacio y todavía está llena de agua.

Dos buzos por cabeza y con tanques de oxígeno: así están sacando a los 12 niños y el profesor atrapados en una cueva de Tailandia
Dos buzos por cabeza y con tanques de oxígeno: así están sacando a los 12 niños y el profesor atrapados en una cueva de TailandiaEP

Los buzos ya conocen las condiciones y este domingo sacaban de ahí a cuatro niños, cada uno de los cuales iba escoltado por dos buzos, llevaba máscaras de oxígeno y su botella la cargaba uno de los profesionales. Iban además atados a ellos para no perderse y llevan también un cable que les va guiando todo el camino. Finalmente, tras ocho horas, consiguieron salir.