No lo dijo, pero seguro que Chris Paul sabía que la visita a Phoneix no iba a ser un partido fácil. Y no porque le fuesen a abuchear sus exaficionados como a Kawhi Leonard. Tampoco exactamente por el rival, uno de los equipos más en forma. Lo que realmente iba a serle difícil es la actuación del árbitro Scott Foster, pero no con el partido, sino específicamente con él.

Eran los instantes finales del cuarto, apenas faltaba posesión para que Scott indicara el tiempo de descanso. Pero antes de eso, Paul protestó una falta pitada sobre Kevin Durant, lo que le costó una técnica. El base siguió protestando la decisión, y Foster volvió a señalarle otra técnica, lo que significó la expulsión.

"Eres una perra, eres una perra", decía CP3 mirando fijamente al 'referee' tras ser expulsado.

"Es algo personal. Tuvimos una situación hace un par de años y desde entonces la cosa es personal. La liga lo sabe, todo el mundo lo sabe. Incluso ha habido una reunión, es algo que tiene que ver con mi hijo. Me parece bien que un árbitro diga lo que quiera decir, pero no deberían usar las técnicas simplemente para intentar tener razón", explicó el veterano jugador.

Una relación difícil, que es palpable sabiendo el balance de partidos ganados/perdidos en playoffs con Scott es de 2-17, y con el resto de árbitros de 70-54.