El gremio de pasteleros en la capital prevé que se igualen los más de un millón de pedidos de roscones de reyes que se hizo en el 2012, aunque según su presidente, Salvador Santos: "Se venderán bastantes kilos menos". En Cataluña tampoco esperan muchas variaciones respecto al año pasado, con una previsión de llegar a 850.000 unidades aproximadamente.

Este dulce típico de Reyes ofrece ya un amplio abanico de variedades y precios, para todos los gustos y bolsillos. Es el caso de la pastelería Nunos de Madrid, que propone este año un "roscón invertido".

La reconocida pastelería Mallorca espera producir las mismas unidades que el año pasado, unas 40.000, aunque detectan que los españoles "consumen cada vez roscones más pequeños", según ha reconocido su jefe de producción, Miguel Moreno. Sin embargo, Moreno ha remarcado que "los esfuerzos del sector por alargar la temporada" están teniendo sus frutos y las compras del roscón se adelantan cada año, de forma que "antes se compraba un roscón grande, pero ahora se compran más y más pequeños".

Por otro lado, los roscones industriales. Se producirán en España 10 millones de unidades para repartir en supermercados y otros puntos de venta. El precio de estos roscones oscilará entre los 8 y 10 euros el kilo. Según un estudio recientemente publicado por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), a excepción de una marca, la calidad de los roscones de pastelería destaca sobre la de los industriales, que en muchos casos recurren al congelado y al uso de grasas y aceites vegetales de menor calidad y perjudiciales para la salud cardiovascular.

Dentro de una amplia oferta para los Reyes, la tradición manda, por ello a ninguno le faltará la corona ni sorpresa, y en algunos casos el haba, que asigna a quien la encuentre la tarea de comprarlo al año siguiente.