Su nombre es 2023 DW y fue descubierto el 26 de febrero. Su trayectoria ha llamado la atención de la NASA, quien ha señala en su cuenta de Twitter que este asteroide tiene un pequeño riesgo de impacto contra la Tierra el 14 de febrero de 2046. Su máxima aproximación se espera para entonces: a 1,8 millones de kilómetros de la Tierra.

El asteroide, descubierto desde el Observatorio MAP San Pedro de Atacama, tiene un diámetro estimado de 49 metros y actualmente se encuentra a 0,12 unidades astronómicas de la Tierra circulando a una velocidad relativa respecto al Sol de 24,63 kilómetros por segundo. Su periodo orbital es de 271 días.

El Centro de Coordinación de Objetos Cercanos a la Tierra de la ESA prevé, a 8 de marzo, una probabilidad de impacto directo de 1 entre 625. Estas probabilidades se recalculan diariamente.

"A menudo, cuando se descubren nuevos objetos por primera vez, se necesitan varias semanas de datos para reducir las incertidumbres y predecir adecuadamente sus órbitas en el futuro", explica la entidad experta en su publicación. La NASA continúa monitorizando el