El denominado 'AVE del
Desierto' se pondrá en marcha un año antes, en septiembre de este año, si bien
lo hará con una oferta y una velocidad inferiores a las previstas, pues
inicialmente circulará sólo cuatro días a la semana y a una velocidad máxima de
200 kilómetros por hora.
Así se ha fijado en el
nuevo acuerdo que el consorcio de empresas españolas encargadas del proyecto ha
alcanzado con la Saudi Railways Organization (SRO), órgano público árabe
promotor del proyecto.
Se trata de la segunda
ocasión en que el grupo español pacta con Arabia posponer la puesta en servicio
del denominado 'AVE del Desierto', uno de los mayores proyectos logrados en el
exterior, estimado en unos 6.736 millones de euros.
Toda vez que se
incumplió el plazo original de puesta en servicio a comienzos de 2017, se fijó
una nueva fecha para marzo de 2018, que tampoco se pudo acometer. El consorcio
ha atribuido estas demoras a las obras que acometen otras empresas en el
proyecto, la ejecución de la plataforma de la línea ejecutada por firmas chinas
y la construcción de las estaciones por parte de empresas locales. De esta
forma, se han evitado las penalizaciones por retraso.
De hecho, en virtud de
este nuevo acuerdo con Arabia, el consorcio español cobrará 210 millones de
euros para la prestación del servicio, según informó este grupo de empresas en
un comunicado.
Además, percibirá otros
35 millones de euros por los servicios de demostración que viene realizando
desde el pasado 31 de diciembre e irá "progresivamente" recuperando
los avales que el consorcio puso como garantía "a medida que entren en
operación los distintos elementos del proyecto".
Este consorcio que a
finales de 2011 se hizo con este 'macroproyecto' está compuesto por las
empresas públicas Renfe, Adif e Ineco, y las firmas privadas OHL, Cobra (ACS),
Indra, Consultrans, Copasa, Dimetronic, Imathia, Inabensa y Talgo.
Esta última compañía
suministra los trenes AVE y, según informó recientemente, tiene listos 33 de
los 36 que integran el proyectos, 16 de los cuales están ya en Arabia. De su
lado, Renfe se encargará de prestar el servicio, que será así el primero que
realice fuera de España.