Hace un año, la cantante mundialmente conocida, Céline Dión, comunicaba en sus redes sociales que sufría una extraña condición llamada el 'síndrome de la persona rígida', una enfermedad que afecta al sistema nervioso central, según ha comunicado Europa Press. Por ello, la artista ha tenido que cancelar su gira 'Courage World Tour' en todas sus fechas de 2023 y 2024 debido a que padece esta enfermedad. "Lamento mucho decepcionarlos a todos una vez más pero, aunque me rompa el corazón, debo cancelar la gira hasta que me sienta preparada para volver al escenario. Quiero que sepanque no me voy a rendiry que no puedo esperar para volver a verlos"," ha declarado Céline Dion en su cuenta de Twitter.

En 2022, la artista de 'My heart will go on' declaraba que sufría el síndrome de la persona rígida, una enfermedad que, según explicó en un vídeo, le causaba "espasmos musculares muy severos y persistentes". Se trata de una patología que afecta al sistema nervioso central y que se caracteriza por "episodios de rigidez y espasmos de los músculos del tronco, de los brazos y las piernas, tal y como explica el Centro Nacional para el Avance de las Ciencias Traslacionales de Estados Unidos. Actualmente, la artista continua en evaluación médica por su equipo de doctores, y según ha comunicado su pagina web, se devolverá el dinero de todas las entradas vendidas mediante "los puntos de venta originales".

¿Qué es el síndrome de la persona rígida?

Céline Dion no es la única persona diagnosticada con esta enfermedad ya que, según ha explicado la CNN en un reportaje, esta patología afecta entorno a un millón de personas. El Síndrome de la persona rígida se caracteriza por provocar rigidez en los músculos, así como espasmos musculares severos y sensibilidad a estímulos como el sonido y las luces, tal y como ha confirmado el Instituto Nacional de Trastornos Neurológico y Accidentes Cardiovasculares al medio de comunicación británico.

El NCATS explica que es una enfermedad autoinmune, es decir una condición en la que el sistema inmune ataca su propio sistema nervioso central, en concreto al cerebro y la médula espinal. Se relaciona habitualmente con otras enfermedades como la diabetes, la tiroiditis, el vitíligo y la anemia perniciosa; y suele afectar más a las mujeres que a los hombres, explica la institución estadounidense.

Esta enfermedad puede diagnosticarse a través de una analítica de sangre en la que se miden los anticuerpos de descarboxilasa de ácido glutámico (GAD) para ver si se encuentran en niveles elevados. Se suelen tratar con dosis de benzodiacepinas, diazepam, baclofeno o inmunoglobulina intravenosa, aunque en estos casos si existen indicios de tener esta enfermedad habría que consultar con un experto para consultar su caso en concreto.

Síntomas

Esta enfermedad puede provocar multitud de síntomas, pero en general se caracteriza por episodios de rigidez muscular en el tronco, asegura la NCATS. Además, en la mayoría de los casos estos síntomas comienzan entre los 30 y 60 años.

Entre ellos se pueden incluir:

  • Episodios de rigidez muscular periódica y espasmos que ocurren debido a una sensibilidad aumentada al ruido, al tacto o algún sobresalto.
  • Posturas anormales.
  • Caídas como consecuencia de la rigidez de los músculos.
  • Epilepsia.
  • Parálisis cerebral en el peor de los casos.
  • Este síndrome también se relaciona con niveles bajos de neurotransmisores por lo que podría acarrear otro tipo de enfermedades como depresión o ansiedad.

Causas

Se desconocen las causas de este síndrome pero, según las investigaciones, se cree que es resultado de una respuesta autoinmune anormal en el cerebro y la médula espinal. Esto se produce cuando el sistema de defensa de nuestro cuerpo ataca por error al propio organismo.

La personas que tienen esta enfermedad cuentan con anticuerpos contra la descarboxilasa de ácido glutámico (GAD-Abs). Los GAD son proteínas que se encuentran en algunas neuronas participantes de la formación de ácido gamma-aminobutírico, responsable de controlar los movimientos musculares. Esto quiere decir que cuando los GAD no funcionan correctamente, no existe suficiente GABA como para controlar los movimientos de los músculos y eso hace que tengan espasmos incontrolados, aunque todavía se requeriría más investigación para conocer a fondo el origen de esta enfermedad, según explica el centro de investigación estadounidense.

¿Tiene cura?

Todavía existe mucha incertidumbre con respecto a este diagnóstico y hace falta más investigación. Además, el pronostico depende mucho de las personas que tienen este síndrome y los síntomas que padecen. Para algunas personas esta enfermedad se suele resolver con tratamiento, aunque hay otras a las que el tratamiento no funciona y la enfermedad podría progresar a otras partes del cuerpo como la cara y otros músculos y dificultar su vida cotidiana.