Después de que el Gobierno haya planteado prohibir la matriculación de coches de diésel, gasolina e híbridos a partir del 2040. El Ejecutivo prevé reducir las emisiones en un 37% en 11 años, cifra por encima de la pedida por la UE. Sin embargo, este plan podría toparse con al Comisión Europea.
Según publica El Economista, Miguel Arias Cañete, comisario europeo de Energía, quiere llevar a la Comisión Europea la medida de Pedro Sánchez. Considera que la prohibición e ciertos vehículos atenta contra la unidad de mercado y de neutralidad tecnológica de la Unión Europea.
Por su parte, la Comisión europea podría poner la lupa sobre esta ley de transición energética si los posibles afectados así lo solicitan. Incluso podría ser revocada en caso de que entrara en conflicto con la regulación europea.
El Gobierno fija 2040 como fecha final para los coches diésel y gasolina en nuestro país. El Gobierno se marca como objetivo una reducción de emisiones del 37% en 11 años, una cifra por encima de la pedida por la UE.
Pedro Sánchez defiende su propuesta de suprimir de aquí a 2040 la venta de coches diésel y gasolina afirmando que "hay que ser valiente". El Gobierno piensa que el medio ambiente no puede esperar, pero para el PP es una medida arriesgada y para Ciudadanos una chapuza.