El Lotus Evija debuta en público vestido con los colores de John Player Special

Entre 1972 y 1986, los Lotus de Fórmula 1 vistieron los colores negro y dorado de la tabaquera John Player Special. Pilotos como Mario Andretti, Nigel Mansell y Ayrton Senna compitieron al volante de algunos de estos monoplazas y, hoy por hoy, la librea de JPS es una de las más icónicas de todos los tiempos, por eso ha sido especialmente emotivo volver a ver un Lotus en circuito ataviado con el mismo traje que lucieron bólidos como el Lotus 72E, el Lotus 87 o el Lotus 98T con el que Senna arrasó en la temporada 1986.

El protagonista es el nuevo Lotus Evija, un superdeportivo completamente eléctrico que todavía no había debutado en sociedad. Para su presentación pública, la firma británica ha escogido el evento más importante del año para los amantes del automovilismo inglés, la Goodwood Speedweek, donde se dan cita coches de todas las épocas para recorrer el circuito de Lord March. El Lotus Evija ha estado acompañado de otros 50 coches históricos del fabricante de Hethel, como el Lotus 25 que pilotó en 1963 Jim Clark, el Lotus 49 de Graham Hill o el Lotus 72-7 de Emerson Fittipaldi.

Lotus ha decidido no utilizar el logotipo de JPS en el Evija, en su lugar ha empleado la frase “Lotus x Goodwood: Creating History since 1948” (Lotus x Goodwood: creando historia desde 1948), pero la combinación de negro y dorado es una clara referencia a su pasado en competición y una forma de dejar claro que su futuro, a pesar de ser completamente eléctrico, está estrechamente ligado con el resto de su historia.

Junto al Lotus Evija negro y dorado en el que Lord March dio una vuelta a la pista de carreras que tiene en su finca de West Sussex, se pudo ver otro Lotus Evija, en este caso pintado en un llamativo color “Solaris Yellow”. Conviene recordar que solo se fabricarán 130 unidades de este supercarde cero emisiones dotado de cuatro motores eléctricos que desarrollan un total de 2.000 CV y 1.700 Nm de par máximo. Con semejante músculo eléctrico, es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en apenas 3 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 320 km/h, todo ello con una autonomía de 400 km y la capacidad de recargar sus ‘pilas’ en menos de 20 minutos utilizando un punto de carga de 350 kW.