DOS VERSIONES: COOPER E Y SE
La nueva era del Mini Cooper llega con dos opciones y 100% eléctrica
La presentación del Mini Cooper eléctrico ha llegado con la confirmación de dos versiones distintas y la reinvención de un modelo alimentado por baterías que conserva parte del ADN del modelo original en el apartado de la estética
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Durante los últimos meses lo habíamos visto de camuflaje, filtrado e incluso una imagen oficial que forzosamente se vio obligada a presentar la propia Mini ante la curiosidad que se estaba suscitando en torno a la imagen del nuevo Mini Cooper eléctrico. Finalmente, tal y como habían prometido, inicio del mes de septiembre fue la fecha elegida para mostrar no sólo su imagen final, sino también los detalles técnicos que lo rodean.
Con el IAA Mobility de Múnich como primer escenario en el que se podrá ver de forma oficial y pública, ya preparado para su comienzo este mismo martes 5 de septiembre, el Grupo BMW ha desvelado los detalles de este nuevo Mini Cooper que llegará en dos versiones, ambas de tracción delantera, conocidas como Mini Cooper E y Mini Cooper SE.
Las principales diferencias entre ambas estarán precisamente en el tren motriz. El Cooper E, que es la versión más básica, contará con un motor eléctrico que entregará 135 kW de potencia y un par máximo de 290 Nm, algo que le permite completar el 0 a 100 km/h en apenas 7,3 segundos. El Cooper SE, más prestacional, contará en este caso con 160 kW de potencia y un par de 330 Nm, lo que le permite rebajar esas cifras de aceleración en seis décimas.
También hay cambios en la batería a emplear por cada una de las versiones, ya que el Mini Cooper E opta por una de 40,7 kWh de capacidad que es capaz de proporcionar hasta 305 kilómetros de autonomía según ciclo WLTP, mientras que el SE también optar por un paquete ligeramente más grande y pasa a contar con 54,2 kWh, lo que le permite completar hasta 402 km entre recargas. Ambos modelos cuentan con un sistema de recarga por Corriente Alterna de hasta 11 kW de potencia,
Mini ha trabajado mucho en conseguir la mayor eficiencia posible, por lo que han puesto un especial empeño en conseguir el mejor coeficiente de resistencia aerodinámico, situándolo en este caso en 0,28 Cx.
En lo referente al diseño exterior, es cierto que ya habíamos podido tener un anticipo durante los últimos meses y ya se conocía que contaría con los faros circulares con tecnología LED tan característicos, así como esa parrilla octogonal que termina por completar la imagen del frontal. Como novedad, los clientes podrán elegir entre tres firmas luminosas para las luces de circulación diurnas, ofreciendo de esta forma un nuevo rango de personalización, mientras que en la parte trasera sucede lo mismo. No hay grandes excentricidades en el conjunto, la esencia Cooper sigue estando presente también en esta era 100% eléctrica.
Si nos trasladamos al interior, se opta por una imagen minimalista, introduciendo en este caso una pantalla central que conserva las formas redondas de 9,44 pulgadas y con el sistema operativoMini Operating System 9 que se opera de forma táctil. Ese concepto de minimalismo está presente en la desaparición de la palanca de cambios y el freno de mano, todo ello comprimido en un selector junto a otros controles como los del sistema de desempañado, modo Experience o el control de volumen.
La originalidad viene de la mano de la luz ambiental, las superficies textiles de los principales elementos o los asientos. Todo un catálogo de opciones que pivota entre los cuatro acabados disponibles: Essential, Classic, Favoured y JCW. Por su parte, el maletero, cuanta con 200 litros de capacidad de almacenamiento, 800 litros en el caso de abatir la fila de asientos trasera.
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