Hyundai Tucson N Line: más deportividad para el SUV coreano

El Hyundai Tucson es uno de los productos más importantes para la marca coreana. Se trata de un SUV de tamaño medio, que compite en uno de los segmentos más disputados del mercado, el de los C-SUV. Lucha con modelos como el KIA Sportage, el recién renovado Toyota RAV-4 o los más clásicos Volkswagen Tiguan y SEAT Ateca, todos ellos modelos con muchas virtudes para sus potenciales clientes.

Cada vez es más habitual encontrar en este tipo de segmentos versiones con tintes deportivos, que realzan el dinamismo de un conjunto que, en concepto, ha sido diseñado para ser práctico y polivalente, y no especialmente prestacional a la hora de buscar dinamismo en carretera. Sin embargo, ya son varias las marcas que apuestan por este formato, y Hyundai no ha querido ser menos.

La marca coreana llevará al Salón de Ginebra la versión N-Line del Tucson, el segundo modelo de la marca que recibe este tratamiento. Así, el nuevo Hyundai Tucson N-Line recibirá nuevos paragolpes y llantas con los que competir con el todopoderoso SEAT Ateca FR, que domina con mano de hierro su segmento. En el interior se esperan también algunos detalles deportivos como la palanca de cambio, el volante o las costuras de los tapizados.

Mecánicamente Hyundai ha afirmado que esta versión N-Line estará disponible con un motor semihíbrido de 48 voltios, por lo que todo apunta a que el bloque diésel de 2 litros y 185 CV será el escogido para impulsar a esta versión tan especial.