Alberto Garzón ha dado explicaciones acerca de su renuncia a formar parte de las listas del Movimiento Sumar en las próximas elecciones generales. En una comparecencia durante este domingo,el ministro de Consumo asegura que haber estado dentro de esas listas "no hubiera sido la mejor decisión".
"Creo que otros compañeros pueden aportar más que yo y, como republicano, creo en la renovación de los personajes públicos", defiende, a la vez que recalca que esa renovación "es sana para los proyectos políticos".
Garzón ha recordado que seguirá trabajando dentro del proyecto de Sumar, aportando su experiencia de "12 años en la primera línea política" en los que, como él mismo ha recordado, ha pasado "de las plazas del 15M, al Congreso y a ser ministro de España".
En la parte final de su intervención, ha reconocido haber tomado la decisión en un "momento complicado", pidiendo "a todas las fuerzas de izquierdas" que trabajen "juntos en torno a Sumar". "No hay un minuto que perder, tenemos que ofrecer una alternativa a la ciudadanía", ha recalcado Garzón.
El ministro también ha compartido su preocupación alrededor de los "proyectos políticos que desprecian la democracia o caricaturizan al adversario político". Su respuesta ante esto es clara: "La izquierda tiene que encontrarse para hacerle frente".
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"No puedo dejar la política porque las razones que tuve para entrar en política siguen vigentes. Sí dejo la primera línea política. Tengo esperanza de que la gente recuerde mi paso por la política como algo útil", agrega Garzón.
De cara a los pactos post-12M
Todos los partidos menos PP y Cs se comprometen a no pactar con la ultraderecha de Vox y Aliança Catalana
PSC, ERC, CUP, Junts y Comuns Sumar suscriben un pacto por el que se comprometen a no aceptar los votos de la extrema derecha para formar gobierno y a impedir que entren, por ejemplo, en la Mesa del Parlament.