El 11 de septiembre es uno de los festivos que recoge el calendario laboral de 2023 de Cataluña. De hecho, es uno de las más importantes, pues ese día se celebra la fiesta nacional de Cataluña, conocida como la Diada. Pero no es la única comunidad donde sus vecinos disfrutan de un día festivo. Lo cierto es que en algunas zonas de la Comunidad de Madrid también celebran sus fiestas locales. Concretamente, en cuatro municipios: San Lorenzo de El Escorial, Parla, Algete y Arganda del Rey.

En el primero de ellos celebran su fin de semana de fiestas en honor a su patrona, la Romería de Nuestra Señora de la Virgen de Gracia. La declarada como Fiesta de Interés Turístico Nacional cuenta con una programaciónformada porofrendas florales, desfiles de peñas y grupos romeros, cánticos de de jotas serranas y bailes. En Parla también es protagonista su patrona, Nuestra Señora de la Soledad. Esta celebración —en marcha desde 1687 con coplas cantadas a la Virgen, sermón y ofrenda de flores— ha mantenido algunas de sus actividades: procesiones, encierros y corridas de toros. Pero ha incorporado otros, como los conciertos.

Los conciertos también estarán presentes ese lunes 11 de septiembre en Algete por sus fiestas patronales en honor al Santísimo Cristo de la Esperanza. De hecho, será ese día cuando se cierre la semana de fiestas, que empieza el 7 de septiembre, con encierros, hinchables y vaquillas. La música también llegará a Arganda del Rey, donde también se celebra la fiesta en honor a la Virgen de la Soledad, su patrona. El pistoletazo de salida lo da una ofrenda floral protagonizada por las peñas, casas regionales, asociaciones y vecinos de la localidad. Cada año desfilan desde la Fuente Nueva hasta la Ermita de Nuestra Señora de La Soledad para entonar frente a ella un salve en honor a su patrona.

¿Y qué celebran en Cataluña?

Mientras tanto, los vecinos de Cataluña estarán celebrando la Diada. Allí también se llevará a cabo una ofrenda floral. El homenajeado es Rafael Casanova, un licenciado en Derecho que tuvo un papel muy importante en la Guerra de Sucesión Española. En ella habían dos mandos: los que apoyaban a Felipe V de Borbón y los que estaban del lado del archiduque Carlos de Habsburgo. Apoyando a este último estaba la Corona de Aragón (Reino de Aragón, Principado de Cataluña, Reino de Valencia y Reino de Mallorca).

De hecho, Rafael Casanova fue nombrado ciudadano honrado por el propio archiduque Carlos de Habsburgo tras derrotar a las tropas borbónicas que sitiaban Barcelona en 1706. En los años siguientes, él se encargó de dirigir a la resistencia ciudadana contra los borbónicos cuando Barcelona se desmarcó del tratado que terminó con la guerra en Castilla en 1713. Este hombre participó en la junta secreta que debía valoraba las propuestas del jefe militar, Antonio de Villarroel. Estos dos hombres organizaron a los ciudadanos para defender sus derechos y leyes en un momento en el que no contaban con apoyos externos.

En un momento dado, las instrucciones de Casanova no fueron escuchadas. Él sugirió aceptar un armisticio temporal para reorganizar la tropa. No se le hizo caso. Aún así, "Casanova mantuvo una actitud valiente en los últimos días del asedio", recoge la web de la Generalitat. Fue él quien encabezó el contraataque final en el terraplén de Jonqueres el 11 de septiembre de 1714. Ese día las tropas borbónicas atacaron los puntos donde la muralla estaba más deteriorada, entre los baluartes del Portal Nuevo, Santa Clara y Levante. Aunque Casanova fue herido, sobrevivió a la derrota. Pero no reapareció públicamente hasta 1719, cuando aprovechó una amnistía para ejercer de nuevo como abogado.

El 11 de septiembre de 1714 supuso el fin de la Guerra de Sucesión en Cataluña y "el arranque de una época en la que se perdieron las libertades seculares". Tras la derrota, Felipe V implantó los Decretos de Nueva Planta que supusieron una pérdida del control económico, fiscal, judicial, aduanero y monetario de Cataluña. Pero también de libertades: la lengua castellana pasó a ser oficial y obligatoria en la Administración y en la judicatura, señala la citada web.

Así pues, el 11 de septiembre es un día en el que se recuerda aquella derrota de 1714 , pero también se homenajean sus leyes y lengua en encuentros multitudinarios.