Granada y Oviedo son las ciudades en las que los varones presentan una peor y una mejor calidad del semen, respectivamente, según un estudio que muestra que los hombres de distintas provincias tienen diferencias estadísticamente significativas en su esperma.

El análisis, presentado por la doctora en Biología y experta en reproducción asistida Rocío Núñez Calonge en el 31 Congreso Mundial sobre Controversias en obstetricia, ginecología y fertilidad (COGI) celebrado en Viena (Austria), refleja que, tras Oviedo, los hombres que residen en Almería, Lleida y Málaga tienen mayor número de espermatozoides móviles, lo que se relaciona con la calidad del semen o la posibilidad de fertilidad.

Así, los hombres analizados en Oviedo tienen, de media, 102 millones de espermatozoides móviles por mililitro eyaculado y, en Almería, 82 millones. A Almería la siguen Málaga (80 millones), Valencia (72 millones), Zaragoza (71 millones), Murcia (68 millones), Cádiz (65 millones), Alicante (54 millones) y Granada (43 millones).

El estudio, que ha examinado 872 muestras de varones que se realizaron un análisis de semen para un estudio de fertilidad que incluía volumen, concentración espermática y movilidad total y activa, muestra también que los pacientes de Almería, Málaga y Oviedo son los que mayor concentración de espermatozoides tienen, y los de Cádiz, Lérida y Granada los que presentan una concentración menor. Según el análisis, los mejores datos en cuanto a movilidad espérmica son los de Oviedo y Cádiz mientras que los peores son los de Alicante y Madrid.

Como detalla la bióloga en un comunicado publicado este lunes, hay ciertas discrepancias entre los científicos sobre si el número de espermatozoides ha variado a lo largo del tiempo, pero asegura que sí existe un cierto consenso sobre la existencia de diferencias en la calidad del semen en función de la localización geográfica.

Añade que para realizar el estudio han comparado la calidad de semen en 11 centros de España (Alicante, Madrid, Lérida, Almería, Málaga, Valencia, Zaragoza, Murcia, Granada, Cádiz y Asturias), que la media de edad de los pacientes fue de 38 años y que no hubo diferencias significativas respecto a la edad entre los diferentes centros.

Cuenta, además, que es difícil de entender cómo ciudades cercanas como Granada y Almería tienen los resultados más dispares. "Aunque es difícil conocer las causas de tales diferencias, una explicación podría ser el estilo de vida u otros factores ambientales. No obstante, queda por ver si tales cambios pueden explicar estas diferencias.

Por ello, es importante la recogida y análisis de los datos de los varones que se realizan un estudio de esterilidad, teniendo en cuenta sus hábitos de salud y así poder elaborar estudios más amplios en el futuro", asegura Núñez. Según concluye la experta, para poder conocer las razones de estas diferencias pretenden ampliar el estudio con más datos de los varones incluidos en el mismo, como tabaquismo, índice de masa corporal y ocupación.