Mariolu, la cala más espectacular de Cerdeña

Cerdeña se ha convertido en uno de los destinos más de moda entre los españoles. Muchos han elegido este rincón del Mediterráneo este verano, gracias a las buenas combinaciones de vuelos y, sobre todo, a que se trata de un lugar casi desconocido para la mayoría y a apenas un par de horas de vuelo. Con 1.849 kilómetros de costa, tenemos margen para encontrar todo tipo de rincones, a cuál más bello, pero si hay uno que es digno de enmarcar, ese es el que forma la cala Mariolu, en la costa oriental. Es una playa que se asoma al golfo de Orsei y que destaca por su especial situación, en medio de un paraje natural y alejada de todo tipo de construcción humana. Con apenas un centenar de metros de largo, es una cala que permite la diversión de toda la familia, especialmente si nos decidimos a tirarnos de las rocas que rodean las esquinas de la playa al mar. No hay peligro alguno y es una sensación diferente. Además, caeremos en unas aguas tan cristalinas que su belleza realmente provocan más de un síndrome de Stendhal a los bañistas. El turquesa es penetrante, casi te deja sin aliento. Y más al contrastarla con la arena, que es fina y blanca pero con sedimentos que le dan un tono algo rosáceo, como si nos encontráramos en una playa formada por polvillo de mármol. Otro punto que llamará la atención son las pequeñas cuevas que hay alrededor, perfectas para los amantes de las 'aventuras' paralelas a los clásicos chapuzones. Llegar a Mariolu no es fácil. Hay dos alternativas: barco y a pie. La primera es la más recomendada, ya que se puede llegar con embarcaciones particulares o con los barcos que diariamente salen de Cala Gonone, Arbatx y Santa Maria Navarrese. En cambio, si se toma la ruta del sendero natural, hay que tener en cuenta la especial orografía, muy escarpada, de ahí que solo se aconseje a profesionales.