Europa
Arriba el telón en el Globe de Londres
Una réplica del teatro de William Shakespeare al sur del Támesis
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Sin duda la figura y la obra de William Shakespeare despierta entusiasmo en todo el mundo. Una adoración que se palpa en muchos puntos de Londres pero especialmente al sur del Támesis. Concretamente su epicentro se localiza en Bankside, una zona de mala muerte en los tiempos isabelinos ya que estaba infestada de burdeles y teatros, donde la compañía del dramaturgo construirá en 1559 el Shakespeare’s Globe. Muchas de sus geniales obras fueron escritas para ser presentadas precisamente aquí. No es de extrañar que se convirtiera en uno de teatros de mayor éxito y renombre de la época. Una construcción con forma poligonal al aire libre en el que los espectadores seguían la trama de la obra a pie o sentados en rústicos bancos de madera según la clase social a la que pertenecían. En 1613 durante una de las representaciones una devastador incendio en el tejado de paja lo destrozó. Sobre sus cenizas se construiría un segundo teatro que siguió funcionando hasta 1642 cuando el puritanismo acechó al arte logrando cerrar todos los teatros de la ciudad y prohibiendo las representaciones. En 1644 fue demolido. El destino quiso que en un innovador actor y director norteamericano, Sam Wanamaker, durante una visita a la ciudad en 1949 comprobase que únicamente una placa conmemorativa en el lugar homenajeaba al dramaturgo y recordaba su existencia. Se planteo reunir fondos para su reconstrucción pero habrá que esperar hasta 1997 para su inauguración. Desgraciadamente él no conseguirá verla. Esta fiel reproducción del edificio original nos evoca el ambiente del Londres isabelino y las costumbres del siglo XVII, aunque con instalaciones más modernas. Como ocurriera en sus orígenes en verano se representan obras teatrales y ha conseguido convertirse en uno de los teatros londinenses de mayor éxito, además de una atracción turística. Se realizan visitas guiadas en las que se muestran las gradas, el escenario y las trampillas secretas utilizadas por los actores para acceder al escenario. En el sótano se encuentra un museo que nos traslada al Londres de la época que conoció el autor. Muestra el contexto de algunas de sus tragedias y comedias junto a grabaciones de varias generaciones de actores desde Laurence Olivier a Judy Dench o Jude Law.
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