KeyMe, la startup que quiere acabar con los cerrajeros

Olvidarse las llaves de casa y no tener ninguna copia en casa de un familiar, amigo o vecino es una de las cosas que más rabia da. Como en esas situaciones lo último que hay que hacer es creerse Spiderman y entrar en casa por las ventanas, no suele quedar otra solución que avisar a un cerrajero. Al final, esta fatídica situación acaba implicando un buen desembolso de dinero por el desplazamiento y la intervención de un especialista en cerraduras.

Para abaratar este trámite hace varios años que la startup neoyorquina KeyMe se propuso que todo el mundo guardara en su aplicación para Android e iOS una copia virtual de las llaves de sus domicilios. A eso se añade un segundo punto complementario: esta digitalización de algo que tradicionalmente ha sido tan analógico incluye la posibilidad de poder solicitar un duplicado por mensajero cuando tienes un descuido o necesitas una copia de tus llaves de casa, oficina o incluso las de tu coche.

Para tener esa 'copia de seguridad' sólo hace falta tomar una foto de la llave con un fondo blanco y por ambas caras y almacenarlas en la app. Ahora bien, ¿es esa app un lugar vulnerable ante los piratas informáticos? La compañía sostiene que toda la información está debidamente encriptada. También puede darse la situación de que alguien haga una copia de tus llaves y la suba a su nube, pero la app mantiene un historial detallado de todos los movimientos de cada llave escaneada, además de asociar cada una a la huella digital del propietario.

Si necesitas una copia de tus llaves existen tarifas diferentes dependiendo del tipo que sea, aunque incluso la más cara sale por un precio más económico que el llamar a un especialista en abrir puertas. Además, puedes personalizar tu pedido desde la aplicación y decorar la parte que sirve de agarre a tu gusto.

Los fundadores de la startup afirman que gracias a sus sistemas robóticos de inteligencia artificial son más eficientes haciendo copias que con los métodos tradicionales, que tienen unos “márgenes de error del 15%”, según declararon los emprendedores a 'Venture Beat'.

Como el plan inicial se quedaba un poco cojo, decidieron ir más allá. Porque en casos de emergencia no todo el mundo está dispuesto a esperar varias horas a que alguien le entregue una copia de tus llaves olvidadas. Así las cosas, eran necesarios lugares físicos a los que poder acercarse en caso de una emergencia. Y para hacerlos realidad levantaron 15 millones de dólares en una ronda de financiación en septiembre de 2016.

De esta forma, a los envíos a domicilio existentes se les ha añadido la posibilidad de acudir a unos 'quioscos' situados en grandes almacenes para hacer las copias en el momento, que se están desplegando ya por toda la geografía de Estados Unidos.

Una salvedad a todo esto: hay que tener en cuenta que las llaves de automóviles tienen un proceso de duplicado más complejo, por los códigos y chips de seguridad que llevan. KeyMe asegura al respecto que es compatible con el “85% de las llaves de coches del mercado”, pero el proceso para las más difíciles de copiar, desde que se pide la copia hasta que se recibe, se puede alargar hasta dos días. Al menos de momento, porque quizá puedan seguir mejorando con el proceso.