En su discurso del pasado viernes, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, fue claro y directo contra quien considera su enemigo: Occidente. Como vemos en el vídeo que acompaña a estas líneas, Putin realizó una defensa de la "cultura" y "tradiciones" rusas, las cuales considera que "no pueden ser tachadas".

Es más, Putin nombró a España entre los países que se han puesto "de acuerdo con Estados Unidos" y han llevado a cabo, opina, una "traición a sus pueblos".

"¿Realmente queremos aquí, en nuestro país, en Rusia, en lugar de 'mamá' y 'papá' tener 'padre número 1, 2, 3...'? ¿Estamos completamente locos? ¿Realmente queremos inculcar a los niños en nuestras escuelas que supuestamente hay géneros además de mujeres y hombres y ofrecer la oportunidad de someterse a operaciones de cambio de sexo?", se preguntaba Putin.

Para el mandatario, se está llevando a cabo una "negación absoluta del hombre", así como un "pisoteo de la religión y de los valores tradicionales". "La supresión de la libertad está adquiriendo rasgos de una 'religión al revés', de un evidente satanismo", zanjó Putin, en un mensaje que puede considerarse un desafío a todos y contra todos.