En el último mes, tres mujeres embarazadas han fallecido por COVID. La última fue una mujer a la que se indujo al parto hace dos semanas tras contagiarse de la enfermedad. Tenía 40 años y patologías previas.

Por este motivo, los especialistas han dado la voz de alerta para que se acelere la vacunación de las mujeres embarazadas. Su riesgo de contagio es igual que el de cualquier mujer, pero el de padecer la enfermedad de forma grave es hasta tres veces mayor en las mujeres gestantes.

Desde el pasado mes de junio, el Gobierno de España recomienda que las embarazadas se vacunen lo antes posible una vez se cumplan las 20 semanas de gestación. Eso sí, les insta a hacerlo solo con las vacunas de ARN Mensajero, es decir, Pfizer o Moderna, que han sido las que han reportado estudios.

La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha reconocido en una rueda de prensa esta "preocupación" por los contagios de mujeres embarazadas, y ha instado a "trabajar en la concienciación" de estas mujeres para que acudan a vacunarse.

Hoy mismo, el consejero de Salud de Andalucía, Jesús Aguirre, ha hecho un llamamiento a las embarazadas en cualquier etapa de gestación para que acudan de forma inmediata a vacunarse, ya que hay "un volumen importante" de mujeres gestantes que están ingresadas en los hospitales de la comunidad.

Los datos reportados por Estados Unidos e Israel sobre los efectos de esta vacuna en las mujeres gestantes indican que es muy efectiva y no señalan efectos secundarios significativos.

Además, protegerían al bebé de manera indirecta, ya que a pesar de que el bebé no desarrolla inmunidad frente al COVID de forma natural, como la madre sí que lo ha hecho se le transfieren por la placenta.

Así, los bebés nacerán inmunizados con anticuerpos que podrán prolongarse mediante la lactancia materna. Sin embargo, no poseen un sistema inmunológico capaz de fabricarlos. Por eso, aún no se ha tomado la decisión sobre si los recién nacidos deben o no inmunizarse frente al COVID.