Ha pasado dos años y ocho meses en la cárcel, está pendiente de juicio y acusado de blanqueo de capitales, organización criminal, delito contra la hacienda pública, tráfico de influencias, cohecho, malversación de fondos, prevaricación y fraude. Ahora, Francisco Granados habla sobre todo ello con Jordi Évole.

Preguntado sobre lo que ha perdido por el camino durante sus casi tres años en la cárcel, Granados explica que "todo o casi todo". "No he perdido mi familia, no he perdido los amigos que te terminan quedando de verdad, pero sí que he perdido mi mundo", afirma.

El expolítico resalta que no ha perdido amigos porque si los ha perdido, "es que no lo eran". Eso sí, Granados confiesa que sí ha tenido "alguna decepción importante", como Luis de Guindos. "Era amigo mío desde los 20 años", destaca y detalla que, desde que fue detenido no ha vuelto a saber nada del exministro.

Otros momentos destacados

Francisco Granados critica la actitud de Bertín Osborne durante un concierto en Valdemoro cuando el expolítico era el alcalde. El cantante debía de dar un concierto "de hora y media , pero cantó 40 minutos, se montó en el coche y salió zumbando, un cabrón", afirma.

Preguntado sobre su paso por la cárcel, Granados afirma que los primeros días en el calabozo fueron los peores porque "los guardias se portaron muy mal". "Por la noche, me cantaban el himno del PP y me decían 'vota a Podemos'", recuerda. Además, cuenta su mal rato al compartir celda con un asesino: "Era un enfermo mental, me despertaba y me estaba mirando a oscuras".

Francisco Granados cuenta a Jordi Évole en este vídeo una divertida anécdota con Esperanza Aguirre y es que la exalcaldesa usaba la expresión "hoy toca mojar pista" cuando quería que se emocionaran en los mítines del partido.

El equipo de Lo de Évole informa a Francisco Granados de que en diciembre de 2014 el alcalde de Valdemoro, del PP, quitó la calle que tenía con su nombre.Mientras Évole no puede evitar su cara de sorpresa, Granados confiesa que se la han quitado "por la cara como a un franquista". Puedes ver su reacción en este vídeo.

Dos funcionarios dieron a Granados la mejor noticia de su paso por la cárcel: le acababan de poner una fianza. El expolítico recuerda emocionado en este vídeo cómo "se abrazaron" y lo celebraron juntos.

Jordi Évole cuenta a Francisco Granados que antes de realizar la entrevista mandó un mensaje a Esperanza Aguirre pidiéndole consejo. Esta es la respuesta de la exalcaldesa y la reacción del expolítico al escucharla.

Durante uno de los parones de la entrevista, Jordi Évole y Francisco Granados comen con el resto del equipo. "Esto acaba como en los mítines de Vox, cantando 'El novio de la muerte'", afirma entre risas el expolítico.

Francisco Granados afirma que no ha cobrado a cambio de ninguna adjudicación y destaca que todo lo que ha dicho Marjaliza sobre él es mentira: "A cambio de beneficios penitenciarios, está dispuesto a hundir la vida de la gente".

Jordi Évole y Francisco Granados protagonizan un momento de tensión en el programa al hablar sobre la libreta del expolítico que la Guardia Civil cree que es una contabilidad B del Partido Popular. Y es que los argumentos de Granados no convencen a Évole: "Francisco, no cuela".

Francisco Granados reflexiona con Évole sobre la operación Púnica. El expolítico destaca que supone que "la filtración" de su cuenta en Suiza se hizo "desde el partido" y que esas mismas personas, cree, "impulsaron esto". "Suena amenaza", destaca Évole tras escucharle.

Francisco Granados afirmó ante el juez que Ignacio González y Cristina Cifuentes tenían una relación íntima. Ahora, admite a Jordi Évole que se equivocó: "Me he arrepentido mucho, no estoy orgulloso y me acompañará toda la vida".