El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha vuelto a cargar contra las palabras del ministro de Consumo, Alberto Garzón, sobre las macrogranjas, además de minimizar la importancia de su competencia: "En la mayoría de las autonomías no la tenemos a nivel de consejeros, la tenemos integradas en otras áreas".

"A mí que opine una cosa u otra sobre las macrogranjas no me preocupa", ha remarcado García-Page, quien ha dicho que él no tiene nada en contra de Garzón, sino que lo que le importa es que "haga bien" su trabajo. "No me parece oportuno que mientras nosotros hacemos campañas en el exterior para vender productos de esta tierra, desde un país extranjero se haga una campaña a la contra de los productos españoles", ha criticado el presidente de Castilla-La Mancha, en referencia a Alberto Garzón.

Además, el político socialista ha lamentado que ha recibido "insultos" por discrepar con el ministro de Consumo, al tiempo que ha defendido que "hay miles de trabajadores (del sector) que hacen bien su trabajo, y que no están cometiendo ningún delito".