Un papa transformador

Wyoming compara al papa Francisco con San José: "Viendo lo que le gustaba reformar la iglesia parecía un carpintero"

El sumo pontífice destacaba por mostrarse siempre muy cercano a los más desfavorecidos y, además, se mostro abierto a llevar a cabo reformas como, por ejemplo, su deseo de que las mujeres ocuparan puestos de poder en la iglesia.

El sumo pontífice destacaba por mostrarse siempre muy cercano a los más desfavorecidos y, además, se mostro abierto a llevar a cabo reformas como, por ejemplo, su deseo de que las mujeres ocuparan puestos de poder en la iglesia.

Como indica Sandra Sabatés, "para muchos el papa Francisco quedará como uno de los pontífices que se mostró más cercano a los desfavorecidos y más abierto a ciertas reformas de la institución eclesiástica". El primer viaje del sumo pontífice fue a la isla de Lampedusa, escenario de la tragedia migratoria del Mediterráneo.

"El papa Francisco era realmente solidario con los que menos tenían", apunta el Gran Wyoming, "de hecho era tan austero que en su testamento solo hay tres cosas: un mate, una sotana y un Jesucristo para el papa móvil". Junto a Juan XXIII, fue el pontífice "más transformador de la iglesia", explica Sandra.

Como indica Sabatés, las reformas más importantes de Francisco "han tenido que ver con la apertura de la fe cristiana a las parejas homosexuales y su tolerancia cero con la pederastia en le seno de la iglesia". "El papa Francisco me recuerda a San José", afirma Wyoming, "viendo lo que le gustaba reformar la iglesia parecía un carpintero".

A pesar de ello, muchas de sus propuestas se quedaron "en buenas palabras" como, por ejemplo, "su deseo de que las mujeres ocuparan puestos de poder en la iglesia", indica Sandra. "La realidad", como apunta la periodista, "pese haber nombrado a alguna mujer en puestos de responsabilidad del Vaticano, fueron muy pocas y nunca se mostró favorable a ir más allá".