En Portugal, la situación es crítica. Virginia López, corresponsal española en Lisboa comenta a Gonzo que la gente está trabajando y aun así, no llega a fin de mes. “Los comedores escolares en Semana Santa han abierto para dar de comer a los niños gratuitamente”, asegura.

José Márquez, periodista de ‘Coreio da Manha’ explica que la clase media está más cerca de la clase baja y que cada día sale una nueva reforma que empeora la situación.

Los pacientes están dejando de ir al médico por los costes. No se hacen pruebas y no toman medicamentos. Algunos portugueses incluso se están pensando el emigrar. Un hombre de 50 años asegura que cualquier sitio de África o en cualquier parte está mejor que su país. “Es muy triste decir esto”. No ven que la situación vaya a mejorar. Piensan que todo se va a quedar igual, o que incluso van a ir a peor.