"Soy hijo de una familia que no se quiso y que tuvieron que evitarse", cuenta Máximo Huerta, que recuerda la violencia que su padre ejercía sobre su madre durante su infancia. "En una mirada de mi padre ya había miedo", admite Máximo Huerta, que recuerda una impactante frase que decía su madre: "Mi madre decia algo muy duro que era, '¿cuándo se morirá mi padre?'. Porque eso significaba su libertad y la mía".

"Cuando se oían las llaves de la puerta de mi padre la vida cambiaba", recuerda el escritor, que destaca: "Yo conozco el miedo, y lo que es peor, me acostumbré al miedo de niño". "Sé perfectamente el sabor al miedo", reflexiona Máximo Huerta, que admite que todavía sigue sintiendo "dolor, pero no rencor". "A mi madre le prohibía pintarse las uñas, pintarse y vestirse de rojo", explica el periodista, que recuerda cómo pintó a su madre de anciana las uñas "como una venganza al pasado". "Ella se las miró y dijo, 'qué guapa estoy'", recuerda.