Carmen Merino, laacusada de decapitar a su pareja en Castro Urdialesy cuyo cráneo apareció en una caja que ella misma había entregado a una amiga en 2019, ha respondido a las preguntas de su abogado durante la segunda sesión del juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Cantabria.

Con muchos nervios y entre llantos, ha asegurado que la noche que se destapó el crimen, su amiga, a la que había entregado una caja semanas atrás -según ella con "juguetes sexuales"-, la llamó pasadas las 00:00 horas: "Era Mari Carmen que me gritaba, no entendía lo que me decía".

"Al llegar a su casa estaban las dos hermanas en el balcón y me dijo: 'hasta que no venga la Guardia Civil no te dejamos subir'. Aluciné, porque no sabía de qué iba el tema. Al llegar la Guardia Civil me dijo 'tengo un regalo para ti arriba'", ha asegurado a las preguntas de su abogado.

Fue en ese momento, cuando subía a la casa por el ascensor, cuando su amiga -según su versión- le dijo lo que acababa de descubrir: "Tengo la cabeza de tu marido metida en una bolsa de plástico". "Yo no sé si me morí o no me morí o qué fue lo que pasó. Para mí todo lo que pasó después es como que lo he soñado", ha dicho.

Es entonces cuando los agentes le preguntaron si ella le había entregado una bolsa a su amiga, a lo que ella respondió que sí. "Mari Carmen me decía que olía mal y que abrió el paquete porque olía mal, y que conforme lo fue abriendo olía mal", ha explicado.

"Yo de herramientas no tengo ni idea"

Preguntada por la motosierra que presuntamente compró para deshacerse del cuerpo de su pareja, la acusada ha apuntado que fue el propio Jesús María el que la compró por internet para hacer tareas en la casa de sus padres.

"Yo de herramientas no tengo ni idea, ni sé ni quiero saberlo. Él hizo la búsqueda, él metió sus datos, compró con su tarjeta y nada, lo mandaron a casa y de ahí se la llevó a casa de los padres. Cuando vino el repartidor lo recogí yo y Jesús la llevó a casa de sus padres", ha declarado. A pesar de ello, ha apuntado que la motosierra no se utilizó porque Jesús se marchaba de viaje.

"La limpiadora me dijo que llevó las bolsas a un punto limpio"

Carmen Merino también ha sido preguntada por la limpieza del domicilió que le encargo a una trabajadora de la limpieza que trabajaba para su "hermano". "Cuando Jesús se marchó pensaba hacer una limpieza general. Jesús es de los que no tira nada, le gusta la caza y la pesca, tiene un montón de revistas. Decidí hacer una limpieza", ha declarado.

A pesar de que en sus extractos aparece la compra de productos de limpieza, Carmen ha asegurado que los trajo la propia trabajadora, que empezó "por la cocina" y que tenía libertad de movimiento por la casa.

Además, sobre la gran cantidad de bolsas de basura, ha apuntado que le dijo a la empleada que se las llevara: "Bajó las bolsas y se las llevó, me dijo que las llevaría a un punto limpio". Merino asegura que nunca le dijo que no las abriera o mirara lo que había dentro de ellas.

La Fiscalía sostiene que Carmen asesinó con alevosía a su pareja y luego se deshizo del cuerpo. Según la Guardia Civil, el móvil del crimen fue económico, pero ella lo ha negado. La investigación apunta a que para deshacerse del cuerpo, la acusada compró una motosierra y luego buscó en Internet qué hacer en caso de que se atascara. La Fiscalía pide para ella 25 años de prisión.