La joven de 19 años celebraba la Nochevieja en un local de
Benidorm y, según la Guardia Civil, dos de los detenidos que la conocían de
clase se ganaron su confianza y la llevaron cerca, a casa de un conocido. Allí
la fiesta comenzó a subir de tono y el propietario los echó, según la
investigación.
Su alternativa era Callosa d'en Sarrià, el sótano de la casa
de uno de ellos estaría disponible y allí es donde presuntamente se cometió la violación.
La víctima cuenta en su declaración ante el juez, a la que
ha tenido acceso 'Espejo Público' que recuerda poco: "Me duché y me acordé
de algo... como que me cogieron por detrás. Estaba en un bordillo pero con la
tierra cerca de mi cara y ahí fue cuando recordé que a lo mejor fue por eso que
tenía un moratón".
"Esa noche yo sí me había drogado pero no con ellos. Consumí
coca, una raya y media. Ellos allí sí que se estaban drogando. Lo que veía en
el piso era coca pero yo no quería nada", señala.
La joven apunta que el líder del grupo le hizo unas
preguntas extrañas y que consumía mucha droga: "Joffre tenía mucha. Cada veinte
minutos se metía una raya. Todos consumían menos Álex. En ningún momento
mantuve relaciones sexuales con ellos. Ese día Joffre me dijo que quería hablar
conmigo un momento. Me preguntó por qué nunca quise tener nada con él, por qué
siempre le rechacé, por qué con amigos suyos sí y con él no. Me extrañó por qué
me estaba preguntando eso".
Joffre, el líder de 'La Manada de Alicante', acusados de violar brutalmente a una joven en Callosa, aseguró ante la jueza que él no participó en la agresión sexual múltiple, según se desprende de su declaración a la que ha accedido 'Espejo Público': "Empecé a beber, empecé a consumir mi droga. Cocaína, dos gramos y medio".
Los vecinos de Callosa d'en Sarrià en Alicante salen a la calle para dar apoyo a la víctima de la última Manada. Los cinco minutos de vídeo que grabaron los detenidos, con imágenes muy explícitas, van a ser claves para determinar su papel en la agresión sexual denunciada.