Muchos niños marroquíes continúan malviviendo en Ceuta: hasta en los huecos de los espigones, sobre amasijos de mantas, se ocultan. Despiertan cada mañana con el miedo a que los devuelvan. Por eso huyeron del centro de acogida, pese a que sabían que pasarían hambre. Jaiha, que solo tiene 12 años, ha contado a laSexta que cruzó a la playa del Tarajal en busca de una oportunidad.
"En España me dedicaré a lo que sea. Yo solo quiero buscarme la vida y ayudar a mis padres y ya está". Su compañero, Yasi, de 15 años, también quiere ayudar a su familia; a los que como cualquier otro menor, echa mucho de menos: "Te juro que me gustaría que vinieran mis padres aquí y que viviéramos juntos como lo hacíamos en Marruecos. Pero es difícil por la documentación".
La ONG 'No Name Kitchen' ha difundido una conversación con un menor de hace unos días, justo cuando estaba siendo devuelto a Marruecos. Dicen que el joven marroquí no sabía ni a dónde iba: "No nos han preguntado si queríamos quedarnos o volver. Nos llevan a la frontera". "Si se están fugando es porque están viendo cómo compañeros suyos han sido devueltos y ellos, claramente, no quieren irse. No se ha hecho un plan individualizado para saber la voluntad de cada menor".
Es lo que ha denunciado a laSexta Mar Soriano, portavoz de 'No Name Kitchen' que insiste en que además "no se ha tenido en cuenta el interés superior del menor porque no se les ha preguntado". Más de 25 ONG ha solicitado por escrito a Pedro Sánchez la suspensión inmediata de las repatriaciones. "Estamos hablando de niños que han sufrido explotación laboral o para la mendicidad, víctimas de trata. Situaciones muy delicadas", ha destacado Patricia Fernández Vicens, abogada de la Asociación Coordinadora de Barrios.
"Situaciones que requieren un estudio pormenorizado, algo que no se ha hecho", ha criticado Fernández Vicens. En definitiva, estas asociaciones piden responsabilidad y que a nadie se le olvide que, ante todo, estamos hablando de uno de los más vulnerables: los niños.