Un hombre ha matado a su mujer en su domicilio familiar de Blanes (Girona), en un crimen de violencia machista cometido cuando los tres hijos de la pareja se encontraban en casa. Según han informado los Mossos d'Esquadra, el suceso ha ocurrido hacia las 5.45 horas en un piso situado en la calle Cristòfol Colom después de que, al parecer, el hombre haya atacado con un arma blanca a su mujer, de la que se encontraba en trámites de divorcio.
Los Mossos se han desplazado al domicilio, donde han comprobado que la mujer estaba gravemente herida y se ha procedido a su traslado a un centro sanitario, aunque ha perdido la vida antes de llegar al hospital. Los agentes han procedido a la detención del agresor, que tras atacar a su mujer se había provocado también lesiones, por lo que ha sido trasladado al vecino Hospital de Calella.
Según informan fuentes municipales, la pareja tenía tres hijos de entre 10 y 22 años, y uno de ellos se ha interpuesto entre sus padres durante la pelea, por lo que también ha resultado herido leve. Los tres hijos de la pareja, que han recibido asistencia psicológica, han conocido el fallecimiento de su madre mientras era trasladada al hospital.
El matrimonio, de origen boliviano, residía hace cinco años en Blanes y estaba actualmente en trámites de separación. El presunto asesino tiene 41 años, mientras que su mujer tenía 40, y todo apunta a un crimen de violencia machista cometido en el domicilio familiar.
En las próximas horas y en función de que la investigación confirme este supuesto, el ayuntamiento estudiará posibles manifestaciones de rechazo y en solidaridad con la víctima y sus familiares. Esta es la octava víctima mortal de la violencia machista en lo que va de año, según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, Asuntos Sociales e Igualdad, y se trata de la primera mujer asesinada en Cataluña en 2018.
Otro gasto más
La denuncia de los trabajadores sobre las cenas de Navidad: tan solo un 15% las pagan las empresas
Las cenas de empresa ya no son lo que eran. Los trabajadores se quejan de que estos eventos tienen precio de oro y que ya no los paga la empresa, sino que el dinero sale de su propio bolsillo.