La Policía Local de Lugo acudió el pasado domingo a un piso debido a una denuncia de ruido por música alta. Un estruendo que era tal que los vecinos no podían dormir. Aun así, para sorpresa de los agentes, en el interior de la vivienda no había ninguna fiesta. Por haber, no había ni personas: solo estaba un gato que había encendido el equipo de sonido al máximo.

En este sentido, según ha relatado la Policía Local, durante la madrugada del 25 de julio vecinos de un edificio de la Ronda das Fontiñas denunciaron "ruido de música en tono alto que les imposibilitaba el descanso". Los agentes, después de comprobar que no había nadie en el interior de la vivienda, empezaron a realizar investigaciones y localizaron por la mañana al propietario del piso, que se encontraba fuera de la ciudad.

Al informarle de las molestias que producía la música en todo lo alto que provenía del interior, el dueño manifestó que, posiblemente, destaca la Policía Local, "lo que accionó el equipo de música fuera su gato que quedó en la vivienda, ya que tiene la costumbre de encender el equipo musical con la pata y mover la rueda del volumen". Por ello, el morador se desplazó de inmediato hasta su domicilio.

Diversas fiestas (humanas) detectadas durante el fin de semana

Por otra parte, a las 00:20 horas del pasado 24 de julio, una patrulla del Grupo Operativo Nocturno de la Policía Local de Lugo fue enviada a un edificio de la Ronda das Fontiñas porque los vecinos denunciaron ruidos molestos procedentes de una vivienda.

Los agentes comprobaron que se llevaba a cabo una fiesta y que la música se escuchaba desde la vía pública, por lo que fue identificado su responsable, al que se le requirió que cesasen las molestias, lo que hizo al instante. Los agentes realizaron acta de denuncia por infracción a la Ordenanza de Protección Ambiental.

Además, sobre las 4:55 horas del 25 de julio una patrulla acudió a un inmueble de la Avenida de A Coruña porque vecinos se quejaban de los ruidos de una vivienda. Los agentes, tras comprobar las molestias, procedieron a pedir al responsable que cesasen. Esta persona manifestó que no era consciente de las molestias, que pararon al instante. Con todo, fue denunciado por infracción a la Ordenanza de Protección Ambiental.