Leanne Barret fue víctima de violencia machista, ahora, tras poner fin a su relación, ha contado su historia. Barret mantuvo una relación durante cinco años con Denver Harris, el cuál la maltrataba. Se conocieron en una fiesta y tras los primeros siete meses de relación comenzó a comportarse de forma violenta. Leanne estaba entonces embarazada de su primer hijo.
"Me golpeaba con frecuencia. Principalmente lo hacía cuando estaba borracho o drogado", ha contado Leanne Barret en Birminghan Live. "Pensaba que todo cambiaría a mejor pronto, que no podía dejarle en ese momento. Pero se volvía peor", continúa. Las brutales palizas no cesaron tampoco durante sus dos embarazos. "Cuando estaba embarazada me seguía golpeando, lo hacía en zonas en las que las enfermeras no pudieran ver los golpes al acudir a las citas para revisar la evolución del embarazo", explica Leanne.
Mantuvieron una relación durante cinco años y los golpes se volvían peores con el tiempo. "En algunas ocasiones, tras las agresiones necesitaba una ambulancia, intentaba escapar y entonces él me agarraba de las manos y me arrastraba", ha explicado. Harris llegó a encerrarla en casa durante varios días. "Se volvía paranoico y me golpeaba e inmediatamente después me decía que me amaba, que lo sentía", ha continuado.
"Era inteligente en su forma de actuar, su forma de hacer las cosas me hacía seguir queriéndolo", ha explicado Leanne Barret. "Me hacía pensar que estaba bien y que cuando me golpeaba era porque había tenido un mal día o porque se había pasado con el alcohol", continúa.
Y es que Leanne llegó a mentir a su médico al acudir a consulta. Para justificar los golpes y hematomas, ella contaba que había sufrido un atraco en el cajero. Pero cruzó su límite cuando descubrió que su pareja había estado robando dinero de las huchas de sus hijos para comprar droga. "Llamé a la policía y desde entonces no le he vuelto a ver", ha contado. En el mes de agosto, Denver Harris se saltó la orden de alejamiento, por lo que fue condenado a tres años y medio de cárcel.