La desesperación y los gritos de Aya son imposibles de olvidar: "He perdido a mi bebé, ¿por qué yo?", se preguntaba la joven de 18 años cuando su bebé cayó al agua en el Mediterráneo. Ahora recuerda que cuando la rescataron no paraba de gritar el nombre de su bebé.

Poco después, la tripulación del Open Arms consiguió rescatarlo del agua. "Llevaron a Yusuf al médico, lo cogí en brazos y así murió Yusuf, con mamá", cuenta la joven.

Con 18 años recién cumplidos, Aya ha tenido que enterrar a su pequeño en Italia. Sin embargo, ese no es el único drama que ha tenido que vivir en tan corta edad. Con tan solo 13 años le obligaron a casarse. "No teníamos dinero y me dijeron que me tenía que casar", recuerda Aya.

Su marido la abandonó tras dar a luz a su primer hijo

Pero tras dar a luz a su primer hijo, su marido la abandonó. Ahora, tal y como relata la joven madre, el niño está con su madre en Guinea. Precisamente, allí comenzó un periplo que la llevó a Malí y Libia, donde se quedó embaraza del pequeño Yusuf. "Decidí que tenía que irme a Italia", cuenta la joven.

Sin embargo, en su camino, desgraciadamente se topó con un mar que no entiende de justicia, un mar que le arrebató a su pequeño mientras su soñada Europa miraba hacia otro lado.