El premio de 3.000 euros de 'El Hormiguero' fue a parar este miércoles a Encarnación, una señora de 74 años que acababa de superar el coronavirus tras varios días ingresada.

Un emocionante momento vivido en el plató, en el que la ganadora explicó que lo había pasado "muy mal", pero no quiso "entristecer a nadie". "Este programa es para que la gente se ría y no quiero tristezas", afirmó.

Sin embargo, su historia era en realidad todavía más dura. Lo revelaba Pablo Motos en el programa del jueves, donde explicó que, aunque no quiso contarlo en directo para no entristecer a la audiencia, el marido de Encarnación acababa de fallecer como consecuencia del COVID-19.

"Quiero contar una historia porque anoche me sobrecogió", ha comenzado el presentador, que ha explicado que, como cada noche, llamaron a una casa a la espera de que quien levantara el teléfono pronunciara las palabras adecuadas para obtener el premio.

"Nos cogió el teléfono una señora encantadora, elegantísima, que tiene 74 años y acababa de pasar el coronavirus", ha recordado Motos, que ha relatado cómo la agraciada no quiso "contar penas" sino estar alegre durante la conexión en directo.

Sin embargo, cuando el personal de El Hormiguero le tomó los datos, descubrieron que "el coronavirus lo habían cogido ella y su marido, y su marido acababa de fallecer".

"Me daban ganas de llorar de pensar en esta señora que no nos lo contó porque no estaba bien en el momento y no quería 'estropear' este programa diciéndonos una cosa que nos hubiera dejado abajo del todo", ha confesado Pablo Motos, que ha enviado "un beso gigante" a Encarnación, a quien todos los colaboradores han dedicado un sentido aplauso.