El Día Mundial sin Tabaco, celebrado cada 31 de mayo en todo el mundo y promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) desde 1988, tiene como objetivo concienciar sobre los riesgos para la salud vinculados a esta droga. España ha cambiado mucho en los últimos años y parece que somos menos dependientes de esta adicción, pero algunas cifras que indican un aumento del consumo resultan preocupantes. ¿Cuánto ha cambiado el consumo de tabaco en España?

Repunte en el consumo diario y esporádico

A pesar de las constantes campañas y normativas antitabaco, todavía fuma a diario el 34% de la población española, según la última Encuesta sobre alcohol y otras drogas en España (EDADES) del Observatorio Español de las Drogas y las Adicciones (OEDA). Esta cifra es tan solo un 0,9% inferior que en los últimos 20 años: en los años 2000 comenzó a bajar esta proporción, pero desde 2011 se observa una tendencia en aumento de los fumadores habituales que ha tenido un especial repunte en los dos últimos años.

Algo similar se aprecia con la gente que no fuma a diario pero reconoce haber fumado en los 30 días previos a la encuesta. También desde 2011 existe un aumento, como indica la gráfica siguiente, más leve que en el consumo diario, pero refleja igualmente una preocupante tendencia que ha hecho que volvamos al mismo nivel de consumo que en 2007, con un 38,8% de la población.

Por sexos, los hombres siguen siendo en general mayores consumidores de tabaco que las mujeres, y por edades son más los adultos de edad media que fuman que los jóvenes, como refleja el siguiente gráfico. Eso sí, también los datos reflejan que ellos han hecho más esfuerzo en los últimos años para dejar este hábito perjudicial. Otro indicador que sigue el consumo de tabaco es la Encuesta Nacional de Salud de España. Según este estudio, que realiza trianualmente el Ministerio de Sanidad, entre 1992 y 2017 un 18% de los hombres se han librado del tabaco a diario, mientras que el consumo de las mujeres apenas había bajado un 2%.

Rechazamos más el tabaco en público

También otras fuentes acusan un aumento del consumo. La última encuesta de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria también apunta a un mayor consumo de tabaco generalizado. Este sondeo, que se realiza en los centros sanitarios, ha acusado un ligero aumento del global de fumadores, del 21% al 23,3% de la población.

Este ligero aumento contrasta con una mayor concienciación contra el consumo de tabaco en los espacios públicos. Así, esta misma encuesta de las sociedades de medicina de familia que desde el año pasado un 9% más están de acuerdo con que se prohíba fumar en vehículos privados cuando hay menores, un 86,3 %. Además, un 75,4% de los encuestados considera que debe prohibirse fumar en lugares al aire libre donde se concentre gente tales como piscinas o centros comerciales abiertos.