Las investigaciones, que contaron con el apoyo de la Secretaría Ejecutiva de Ameripol y de Interpol, se iniciaron cuando los ciberagentes españoles hallaron en la denominada 'Darknet', un enlace a la aplicación de telefonía Whatsapp, que les condujo hasta un chat en el que pedófilos de varios países de habla hispana intercambiaban pornografía infantil.

A partir de este hallazgo, se hicieron nuevas indagaciones para localizar los diferentes grupos análogos creados por los participantes del chat detectado inicialmente, dando como resultado una investigación que implicó a 24 países con más de cien personas investigadas.

La parte desarrollada en España ha culminado con la detención de 11 personas: una en la Comunidad de Madrid, tres en Cataluña, tres en Andalucía, una en Castilla la Mancha, una en Galicia, una en la Comunidad Valenciana y una en Canarias.

También se han practicado registros en los domicilios de los investigados, en los que los agentes se han incautado de más de un centenar de diferentes soportes para almacenar el contenido pedófilo. En el análisis del material intervenido se han detectado archivos de pornografía infantil desconocidos hasta ahora para los investigadores, sobre los que se está trabajando para identificar a los abusadores y a sus víctimas.

La investigación internacional se ha coordinado desde España y en la operación han participado también agentes de la Policía Nacional española destinados en algunos países de Hispanoamérica, que han participado directamente en algunos de los registros llevados a cabo en Bolivia y Colombia.

En otros países han sido arrestadas 39 personas, siete de ellas en Colombia, siete en Bolivia, tres en Brasil, cuatro en Chile, tres en Costa Rica, dos en República Dominicana, dos en Guatemala , una en Italia, dos en México, una en Nicaragua, una en Panamá, dos en Paraguay, dos en Uruguay y dos en Venezuela.

Algunos de los detenidos por distribuir pornografía infantil alegaron en sus declaraciones que su objetivo al descargar y distribuir material de abuso a menores, era infiltrarse en redes pedófilas con el fin de descubrir a sus miembros.